Una vez cuando Durvasa Muni fue invitado a la casa del padre de Kunti, esta lo satisfizo por servirlo, por lo tanto él la bendijo con el poder místico de poder llamar a cualquier semidiós que ella quisiera. Por curiosidad. llamó de inmediato al dios del Sol.

Tan pronto como Kunti lo llamó él apareció ante ella. Quedando sorprendida le dijo:

"Estaba simplemente examinando el poder místico de este mantra. Lo siento pero te he llamado innecesariamente. Por favor perdóneme."

El dios del Sol dijo:

"Oh bella Kunti, el encuentro con los semidioses no puede ser inútil. Por lo tanto, déjame colocar mi semilla en tu vientre y así de esta manera tu puedas engendrar un hijo. Yo arreglare para mantener tu virginidad intacta ya que todavía tu eres una joven soltera."

Acorde a las reglas de la civilización Védica si una joven da a luz a un niño ante de ser casada nadie se casará con ella. Por lo tanto, a pesar de que el dios del Sol quería darle un hijo ella dudó porque todavía estaba soltera. Para mantener su virginidad intacta el dios del Sol arregló que su hijo naciera de su oído.

Después de decir esto el dios del Sol depositó su semen en el vientre de Kunti y retornó a su reino celestial. Así Kunti dio a luz a Karna, un niño que fue como un segundo dios del Sol.